Amistad. Eso que muchos buscan desesperadamente. Ese sentimiento que es mucho más fuerte que el amor, que nos hace sentir como si flotásemos en una nube. Nos hace mentir, nos hace soñar, nos hace reír y puede que hasta nos haga amar. No todo el mundo puede sentirlo porque no todo el mundo sabe apreciar realmente lo que quiere. Hasta el día en que lo pierde. Y en ese momento lloras, y no sabes que hacer. Porque uno puede llorar por amor o por una pérdida familiar, pero siempre será mucho más duro decir adios a tu verdadero amigo.
Dicen que nadie merece nuestras lágrimas, y quien las merece no nos hace llorar. Pero no todas las lágrimas son de tristeza. Existen las lágrimas de alegría. Asi que yo hoy brindo por ellas, por las veces en las que nos reímos y no podemos parar, por las veces en que esas pequeñas gotitas asoman a nuestros ojos produciéndonos felicidad.
Y por esto exactamente Violett y yo hemos creado este blog. Para que todos los días sean sueños, locuras y risas.
Ah, y recuerda: Si vuelves a llorar, que sea de alegría ;)